UN CRONOGRAMA DE TAREAS PREVENTIVAS
Para maximizar la vida útil y el desempeño de tu vehículo, aquí hay una lista de elementos que debes controlar según la época y la estación del año. Algunas de estas partes de tu vehículo deben ser revisadas regularmente y otras solo a largo plazo. Asegúrate de seguir el cronograma de mantenimiento de tu vehículo y el registro de intervalos de servicio.
Cuidar tu automóvil y mantenerlo en buen estado de funcionamiento requieren un poco de esfuerzo, pero definitivamente no tienes que ser un genio mecánico para mantenerlo con un buen funcionamiento. El mayor obstáculo es ser consciente de lo que se debe hacer, y con qué frecuencia, para un mantenimiento óptimo del vehículo. Al conocer los conceptos básicos sobre lo que necesita tu automóvil y cuándo debes realizar tu mantenimiento de rutina, te asegurarás de que tu automóvil esté en óptimas condiciones de funcionamiento.
Como beneficio adicional, si puedes demostrar que tu vehículo ha recibido un buen mantenimiento, podrás pedir el precio máximo cuando sea el momento de revenderlo. Y, por supuesto, es importante recordar que los costos de mantenimiento del automóvil, aunque no siempre son económicos, en última instancia pueden ayudarte a evitar reparaciones mucho más costosas en el futuro.
Para facilitar el seguimiento del cronograma de mantenimiento de tu automóvil, hemos creado una lista de verificación de mantenimiento de automóvil simple y descargable para ayudarte a mantenerte al tanto de tu mantenimiento automotriz.
CONTROLES A CORTO PLAZO
Para el mantenimiento adecuado del vehículo, inspecciona lo siguiente:
NIVELES DE ACEITE Y REFRIGERANTE
Cada mes, o cada pocas recargas de combustible y especialmente antes de realizar viajes largos por carretera, es una buena idea meterse debajo del capó de tu automóvil e inspeccionar los niveles de aceite y refrigerante mientras el motor está frío. Los niveles bajos de cualquiera pueden provocar problemas en el motor si no se controlan. Consulta el manual del propietario para ubicar ambos en tu vehículo específico.
FILTRO DE AIRE
El filtro de aire de tu motor es lo que regula el aire que fluye hacia tu motor y ayuda a evitar la entrada de suciedad y partículas. Al asegurarte de que tu filtro de aire fluye correctamente, puedes mejorar la eficiencia del combustible, disminuir las emisiones y ayudar a garantizar la vida útil de tu motor. Esto se puede hacer fácilmente en casa, así que consulta el manual del propietario para obtener instrucciones y saber con qué frecuencia debe cambiarse.
PRESIÓN DE LAS LLANTAS Y PROFUNDIDAD DE LA BANDA DE RODADURA
Dado que las llantas bien mantenidas son parte integral de una conducción segura y una buena eficiencia de combustible, acostúmbrate a inspeccionar visualmente tus llantas con frecuencia. Controla la presión de tus llantas todos los meses y antes de emprender viajes largos o llevar una carga extra. No olvides el repuesto. Se necesitará un manómetro para revisar la presión de tus llantas. Además, ten en cuenta que durante los meses más fríos la presión de las llantas baja una libra de presión cada 10 grados de disminución de temperatura. El manual del propietario te dirá cuánta presión de aire necesita tu llanta. Puedes comprobar la profundidad de la banda de rodadura utilizando el sencillo método del centavo.
FAROS, LUCES DE GIRO, LUCES DE FRENO Y LUCES DE ESTACIONAMIENTO
Es importante que las luces de tu vehículo funcionen correctamente, pero a menudo puede ser un elemento fácil de pasar por alto. Una vez al mes, enciende los faros cuando estés estacionado frente a una superficie plana y verifica que ambos faros funcionen correctamente y estén bien ubicados. Camina alrededor de tu automóvil e inspecciona visualmente las luces de giro y las luces de estacionamiento. Pídele a un amigo que se pare detrás del automóvil mientras pisa los frenos para asegurarse de que las luces de freno funcionen.
ACEITE Y FILTRO
El aceite en el motor de tu vehículo cumple una gran cantidad de funciones: lubrica las partes móviles, ayuda a actuar como un sellador contra la suciedad, enfría el motor, reduce el desgaste y ayuda a prevenir la corrosión del motor. Mantenerlo limpio es vital para la buena salud del motor. Dependiendo de tu automóvil y del tipo de aceite que estés usando, es posible que debas cambiar tanto el aceite y el filtro de aceite cada 3 meses o 3,000 millas. Muchos manuales de propietarios de vehículos más nuevos recomendarán cambiar el aceite con menos frecuencia, a menudo entre 5,000 y 10,000 millas. Lee el manual del propietario de tu vehículo y consulta con un profesional para asegurarte de comprender qué es lo apropiado para tu automóvil.
ROTAR LAS LLANTAS
Según la alineación de tu vehículo, el uso y muchos otros factores, los patrones de desgaste de la banda de rodadura de tus llantas pueden variar entre los delanteros y traseros, o incluso entre un lado de la banda de rodadura y el otro. Rotar tus llantas ayudará a prolongarles la vida útil al equilibrar de manera más uniforme el desgaste de la banda de rodadura y ayudar a prevenir problemas de ruido y vibración.
ENCERAR EL VEHÍCULO
Asegurarte de encerar tu vehículo cada seis meses después de lavarlo no solo lo mantendrá brillante, sino que también ayudará a mantener la pintura en buen estado y reducirá la posibilidad de oxidación. Muchos elementos irritantes como el polvo, la arena y la sal pueden acumularse y los factores ambientales como el ozono y la luz ultravioleta pueden causar daños microscópicos, pero la cera puede ayudar a minimizar esto al formar un sello protector para prolongar la vida útil de la pintura.
CONTROLES A LARGO PLAZO
LÍQUIDO DE TRANSMISIÓN
Al igual que el aceite de tu motor, el líquido de transmisión es un lubricante que ayuda a mantener todas las piezas móviles dentro de tu transmisión funcionando correctamente. Ya sea que conduzcas un vehículo de transmisión automática o uno de transmisión manual, es esencial que revises y cambies el líquido de transmisión cuando sea necesario para evitar daños o reemplazos costosos en la transmisión. Sigue las recomendaciones del fabricante del vehículo.
LÍQUIDO DE LA CAJA DE TRANSFERENCIA
En los vehículos con tracción en las cuatro ruedas o en todas las ruedas, la caja de transferencia es lo que transfiere la potencia de la transmisión a los ejes. Deberás revisar el líquido de la caja de transferencia de acuerdo con las recomendaciones del fabricante del vehículo para asegurarte de que esté adecuadamente lleno y que no tenga fugas. Esto requerirá que te metas debajo del vehículo, por lo que se recomienda llevarlo a un profesional.
INSPECCIONAR AMORTIGUADORES Y PUNTALES
Los amortiguadores y puntales de tu automóvil funcionan para controlar el impacto y el rebote cuando tu vehículo pasa sobre baches en la carretera y son una parte esencial del sistema de dirección. Debe hacer que los inspeccione un profesional cada 50,000 millas o debes llevar tu automóvil al taller si notas una disminución en la suavidad o pérdida de control al conducir.
CAMBIO DE LÍQUIDO REFRIGERANTE
El radiador de tu automóvil es un componente vital que ayuda a mantener el motor fresco y funcionando correctamente. Hacer que tu sistema de refrigeración se enjuague regularmente ayudará a eliminar los contaminantes que pueden acumularse en el interior y garantizará que tu radiador se llene hasta el nivel adecuado. Consulta las recomendaciones del fabricante de tu vehículo para saber con qué frecuencia se debe cambiar el refrigerante.
BUJÍAS
Las bujías de tu motor encienden la mezcla de combustible y aire que finalmente impulsa al vehículo. Si tus bujías no funcionan correctamente, tu motor perderá potencia y no funcionará a su capacidad óptima. Haz que un profesional revise y reemplace las bujías defectuosas según las recomendaciones del fabricante del vehículo o cuando sientas una disminución en la potencia del motor.
CORREA SERPENTINA
Aunque puede parecer una simple pieza de goma, la correa serpentina de tu vehículo es esencial para mantener tu automóvil en funcionamiento al alimentar dispositivos periféricos como el alternador, la bomba de dirección asistida y el compresor de aire acondicionado. Inspecciona visualmente la correa para asegurarte de que no tengas grietas u otro desgaste o rotura.Reemplázala si está dañada o de acuerdo con las recomendaciones del fabricante de tu vehículo.
DIFERENCIAL DELANTERO O TRASERO
Los diferenciales son dispositivos que dividen el torque, o la potencia, del motor y le permiten enviar potencia a las llantas. En los vehículos con tracción delantera o trasera, solo hay un diferencial, pero en los vehículos con tracción en las cuatro ruedas y en todas las ruedas, hay un diferencial delantero y trasero, y posiblemente incluso un diferencial central. Como muchas piezas de tu vehículo, los diferenciales deben mantenerse lubricados para garantizar un funcionamiento adecuado. Haz que un profesional revise y cambie el líquido siempre que el fabricante de tu vehículo lo recomiende.
CONTROLES DE TEMPORADA
Las necesidades de tu vehículo pueden variar según la temporada y las condiciones de conducción. Las siguientes son algunas sugerencias para agregar a la sección de notas de la lista de verificación de mantenimiento de tu vehículo:
REEMPLAZAR EL LIMPIAPARABRISAS
Los limpiaparabrisas deben reemplazarse aproximadamente una vez al año, o siempre que la eficacia se vea comprometida. En los meses de invierno, también podría ser una buena idea instalar escobillas limpiaparabrisas de invierno para un desempeño óptimo. También debes retirar los limpiaparabrisas del vidrio cuando esté estacionado durante el invierno para evitar la acumulación de hielo.
CONTROLAR EL DESEMPEÑO DE LA BATERÍA
La batería de tu automóvil es uno de los componentes más importantes para que tu vehículo funcione. La batería de un automóvil suministra grandes cantidades de corriente eléctrica al arranque, al motor y otros accesorios electrónicos del vehículo. Las temperaturas extremas afectan el desempeño de la batería, por lo que las pruebas periódicas garantizarán que funcione cuando la necesite.
CAMBIAR LLANTAS
Según el lugar donde vivas y las condiciones de conducción invernales que puedas encontrar, es posible que desees cambiar tus llantas en los meses fríos y con nieve por unas llantas de invierno/nieve. Cuando la temperatura está constantemente en el punto de congelación o por debajo de él, los compuestos de las llantas que no son de invierno se endurecen, lo que reduce la tracción y el desempeño de manejo al tiempo que aumenta la distancia de frenado. Las llantas de invierno tienen patrones y compuestos en la banda de rodadura diseñados para permanecer suaves en el frío y proporcionar agarre en condiciones de conducción con nieve, aguanieve y hielo.
REVISAR LOS NIVELES DE REFRIGERANTE
También es importante revisar los niveles de anticongelante en el radiador en los meses de invierno para evitar que se congelen el radiador o los componentes del motor. Por lo general, se recomienda una mezcla 50/50 de anticongelante y agua, pero consulta el manual del propietario o con un profesional para estar seguro.
Cumplir con un cronograma de mantenimiento del automóvil y llevar buenos registros de lo que has hecho puede ayudar a prolongar la vida útil de tu vehículo y protegerlo de averías, reparaciones costosas y otras sorpresas desagradables.
